¿Es recomendable usar aceite más grueso para evitar el consumo de aceite en tu motor?
- Área Académica de Metalurgia

- 18 ene
- 3 Min. de lectura
Si tienes un motor que consume aceite debido al desgaste o a fallos en los componentes internos, probablemente hayas considerado cambiar a un aceite de mayor viscosidad como solución temporal. Aunque este enfoque puede parecer una buena idea, hay varios factores técnicos que debes tener en cuenta antes de tomar una decisión. A continuación, analizamos las ventajas y desventajas de este enfoque para ayudarte a tomar la mejor decisión para tu motor.

↓↓ AQUI EL VIDEO ↓↓
Ventajas de usar aceite más grueso
Reducción del consumo de aceite: Un aceite más espeso puede ayudar a reducir las fugas y el consumo por quema de aceite, especialmente en motores más viejos o con tolerancias amplias entre piezas debido al desgaste. Al ser más denso, puede sellar mejor las áreas de contacto, lo que impide que el aceite se escape por las juntas o se queme de manera excesiva.
Mayor película protectora: Al ser más viscoso, el aceite crea una película protectora más gruesa entre los componentes del motor. Esto puede ser útil en motores con segmentos y válvulas desgastadas, ya que ayuda a prevenir el contacto metálico directo y mejora el rendimiento general en motores con mucho kilometraje.
Desventajas de usar aceite más grueso
Desgaste acelerado: Si tu motor está diseñado para funcionar con un aceite de menor viscosidad, como el 5W-30 o 10W-30, el uso de un aceite más grueso puede dificultar la correcta lubricación, especialmente en arranques en frío. El aceite más denso no fluye con la misma facilidad, lo que puede generar mayor fricción y desgaste en los componentes del motor.
Problemas en climas fríos: En condiciones de bajas temperaturas, el aceite grueso tarda más en circular por el motor. Esto significa que, durante los arranques en frío, el motor podría no recibir la lubricación necesaria inmediatamente, lo que aumenta el riesgo de daños en los componentes internos.
Menor eficiencia: Un aceite de mayor viscosidad incrementa la resistencia interna del motor, lo que puede reducir la eficiencia general. Esto puede traducirse en una ligera pérdida de potencia y un mayor consumo de combustible.
Problemas con motores modernos: Los motores modernos están diseñados con tolerancias muy precisas, lo que significa que requieren aceites específicos para garantizar su buen funcionamiento. Usar un aceite de mayor viscosidad en estos motores puede afectar el rendimiento de sistemas delicados, como las válvulas de tiempo variable (VVT) o los turbocompresores, dañando componentes clave del motor.
Recomendación
Diagnóstico primero: Si el consumo de aceite es leve, lo mejor es primero identificar la causa del problema. Los sellos, guías de válvulas o segmentos desgastados pueden ser los culpables, y en muchos casos, una reparación específica podría resolver el problema sin necesidad de cambiar el tipo de aceite.
Si decides usar aceite más grueso: Asegúrate de que el aceite se ajuste a las especificaciones recomendadas por el fabricante para el clima en el que conduces. Los aceites más gruesos pueden ser útiles en ciertos contextos, pero deben ser usados con cautela.
Alternativas más seguras: Si prefieres evitar los riesgos asociados con un aceite más viscoso, existen aditivos que restauran los sellos o mejoran la compresión del motor. Estos productos pueden ofrecer una solución menos invasiva y más segura para motores desgastados.
Conclusión
Aunque usar un aceite de mayor viscosidad puede parecer una solución rápida para el consumo de aceite, es importante sopesar los pros y los contras. En muchos casos, una solución más duradera podría ser reparar los componentes defectuosos o utilizar aditivos diseñados para restaurar la integridad del motor sin comprometer su rendimiento. Siempre es recomendable consultar con un profesional antes de realizar cambios en el tipo de aceite de tu vehículo.










Comentarios