No tires la cubierta de la luz trasera rota sin antes saber este secreto

Si alguna vez has tenido una cubierta de luz trasera rota y has pensado en desecharla, espera un momento. Antes de tirar esa pieza, te invito a descubrir un secreto que podría ayudarte a darle una nueva vida, ahorrarte dinero y ser más creativo de lo que imaginas. En este post, te contaré por qué esa cubierta rota podría ser mucho más valiosa de lo que parece.

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Créditos: Interesting Skills

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Las cubiertas de las luces traseras de los autos, aunque están hechas de materiales plásticos como el policarbonato o el acrílico, se pueden reparar si se rompen o agrietan. Aquí te dejo algunas formas comunes de hacerlo:

1. Reparación con adhesivo epóxido

Si la cubierta está rota en varias piezas, puedes usar un adhesivo epóxido fuerte para pegar las partes. Asegúrate de que las superficies estén limpias y secas antes de aplicar el adhesivo. Este tipo de pegamento crea una unión fuerte y duradera.

2. Lijado y pulido

Si la cubierta tiene grietas pequeñas o rayones, puedes lijarla suavemente con papel de lija de grano fino (por ejemplo, 2000) y luego pulirla con un compuesto de pulido para restaurar su claridad. Esto puede mejorar su apariencia y ayudar a que la luz brille de manera más uniforme.

3. Uso de kits de reparación para luces de automóviles

Existen kits de reparación de luces de automóviles disponibles en tiendas de autopartes. Estos kits generalmente contienen resinas especiales que se aplican sobre las grietas o áreas dañadas para sellarlas y restaurar la integridad de la cubierta.

4. Parches o tapaduras para grietas grandes

Si la grieta es más grande, a veces se puede usar una lámina delgada de plástico o un parche de policarbonato que se adhiere sobre el área dañada. Esto no es una solución permanente, pero puede hacer que la luz funcione de manera segura hasta que sea posible reemplazar la cubierta.

5. Reemplazo del plástico (si es necesario)

Si la cobertura está severamente dañada, algunas personas optan por cortar el área dañada y reemplazarla con una lámina de plástico del mismo tipo, que luego se pega o se suelda. Esto requiere un poco más de habilidad y herramientas, pero puede ser efectivo si deseas una reparación duradera.

Consejos importantes:

• Asegúrate de que la reparación no interfiera con la visibilidad de las luces. La seguridad es lo más importante, así que asegúrate de que la luz brille con suficiente intensidad.

• Si no te sientes cómodo con la reparación, o si el daño es demasiado extenso, lo mejor es consultar a un profesional o reemplazar la cubierta.

Así que la próxima vez que se rompa una cubierta de luz trasera, ¡no la tires de inmediato! Con las herramientas y materiales adecuados, es posible repararla y alargar su vida útil.