Pocas personas conocen el secreto del termostato malogrado

El termostato es un componente esencial del sistema de refrigeración del motor de un vehículo, cuya función principal es regular la temperatura del motor para que funcione de manera eficiente. El termostato controla el flujo de refrigerante entre el motor y el radiador, permitiendo que el motor se mantenga a una temperatura ideal para su funcionamiento.

Un termostato dañado puede causar varios problemas en el rendimiento del motor de tu vehículo. Aquí te dejo una lista de los síntomas más comunes de un termostato defectuoso y cómo pueden afectar el funcionamiento de tu automóvil

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Créditos: LaTam Automotriz

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Si tienes un termostato malogrado, lo más adecuado es reemplazarlo lo antes posible. Un termostato defectuoso puede causar varios problemas en el motor de tu vehículo, como el sobrecalentamiento del motor, un consumo de combustible ineficiente, o incluso daños más graves a largo plazo. Aquí te dejo algunas opciones que puedes considerar:

1. Reemplazar el termostato dañado

• Reemplazo inmediato: La mejor opción siempre será reemplazar el termostato malogrado por uno nuevo y adecuado para tu vehículo. Este componente no es costoso y, generalmente, es fácil de reemplazar.

  • Pasos para reemplazarlo:

    1. Apaga el motor y espera que se enfríe.

    2. Drena el refrigerante del sistema de refrigeración.

    3. Ubica el termostato (generalmente cerca del radiador).

    4. Retira las mangueras del termostato.

    5. Quita el termostato viejo y coloca uno nuevo.

    6. Vuelve a montar las mangueras, llena el sistema de refrigerante y verifica que no haya fugas.

2. Probar el termostato (si no estás seguro de que está mal)

Si no estás completamente seguro de que el termostato está defectuoso, puedes hacer una prueba básica:

• Prueba de temperatura: Si el motor no alcanza la temperatura ideal de funcionamiento o el indicador de temperatura fluctúa, podría ser una señal de que el termostato está atascado en una posición abierta o cerrada.

• Prueba del termostato fuera del vehículo: Puedes sacar el termostato y colocarlo en agua caliente (a unos 85-90°C). Un termostato en buen estado debería abrirse a esa temperatura. Si no se abre, es un indicio claro de que está dañado.

3. Circular sin termostato (solución temporal)

• Si no puedes reemplazar el termostato inmediatamente, algunas personas optan por quitar el termostato y circular temporalmente sin él, pero esto no es recomendable como solución a largo plazo.

• Desventajas:

  • El motor no alcanzará la temperatura ideal de funcionamiento, lo que afectará la eficiencia del combustible y aumentará el desgaste del motor.

  • Mayor emisión de contaminantes y peor rendimiento del motor.

• Usa esta solución solo como medida temporal hasta que puedas reemplazar el termostato.

4. Reparar el termostato (no recomendado)

• Aunque algunas personas intentan reparar un termostato malogrado, esto no es una solución fiable. Los termostatos están hechos para ser completamente funcionales o reemplazados.

• Problemas con la reparación:

  • No se garantiza que funcione correctamente después de repararlo.

  • El termostato está expuesto a altas temperaturas, por lo que cualquier reparación casera no resistirá esas condiciones.

5. Consultar con un mecánico profesional

Si no te sientes cómodo realizando el reemplazo tú mismo o si no estás seguro de cuál es el problema exacto, lo mejor es consultar con un mecánico. Ellos pueden diagnosticar y reemplazar el termostato de manera eficiente, además de revisar que el sistema de refrigeración en su totalidad esté en buen estado.