🔥🚛 ¿Por qué este camión ruso giró sus ruedas? 😱¡Descúbrelo! 🧠 ¡La razón es INCREÍBLE!

Cuando hablamos del GAZ-63, hablamos de una auténtica bestia soviética: un camión todoterreno que sirvió tanto en tiempos de paz como en conflictos bélicos desde finales de los años 40 hasta bien entrados los 60. Su fama proviene de su robustez, fiabilidad extrema y capacidad para sortear los terrenos más complicados, desde los suelos helados de Siberia hasta los lodazales europeos.

Pero hay un detalle que ha llamado la atención de los más observadores:¿Por qué el GAZ-63 llevaba las ruedas traseras “invertidas”, es decir, con la llanta hacia afuera y el eje más visible que en otros camiones? 🤔La respuesta es tan ingeniosa como sencilla.

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Creditos: Gigantes De Carretera

1️⃣ Distribución del peso y estabilidad

El GAZ-63 es un camión 4x4, pensado para cargas pesadas y uso militar. Al colocar las llantas traseras invertidas (en “posición negativa” respecto a las delanteras), se lograba aumentar la anchura de la vía trasera sin cambiar el eje ni las llantas. Esto daba una mayor estabilidad lateral al vehículo, evitando vuelcos en pendientes y mejorando su paso por terrenos irregulares.

2️⃣ Diseño modular y economía de piezas

La URSS buscaba estandarización para facilitar reparaciones en cualquier rincón del país. Las llantas del GAZ-63 son iguales para el eje delantero y el trasero. Sin embargo, el camión usa rueda gemela en el eje trasero para carga. Como la misma llanta sirve para adelante y para atrás, basta girar una para que encaje correctamente en su posición. Así:

• Reduces el número de repuestos diferentes.

• Simplificas el trabajo en campo, ya que una sola medida y tipo de llanta sirve para todas las posiciones.

3️⃣ Mejora de la tracción en barro y nieve

Al ampliar la distancia entre las ruedas traseras (cambio en el “offset” de la llanta), el camión:

• Mejora el agarre en suelos sueltos (barro, nieve, arena).

• Distribuye mejor el peso, evitando que el camión “se clave” en los surcos que deja el eje delantero.

4️⃣ Simplicidad de fabricación

En una economía planificada como la soviética, reducir complicaciones es clave. La misma pieza montada en distintas orientaciones permite:

• Producir en masa.

• Reducir costos logísticos.

• Simplificar el stock en almacenes y estaciones de servicio militares.

⚙️ Ciencia detrás del diseño

Desde el punto de vista de la mecánica automovilística, cuando aumentas la distancia entre las ruedas traseras (ancho de vías), disminuyes el centro de gravedad lateral y la tendencia al vuelco en terrenos inclinados. Además, un camión que trabaje fuera del asfalto necesita que cada eje tenga la mejor tracción y estabilidad posibles.

La configuración invertida es una forma elegante de:

• Aprovechar la rigidez del chasis.

• Repartir tensiones en el eje trasero.

• Mejorar el radio de giro y la maniobrabilidad en zonas difíciles.

💡 Conclusión

El secreto del GAZ-63 no es una mera casualidad estética, es una decisión calculada desde la ingeniería soviética. Al voltear las ruedas traseras lograban:

• Mejor estabilidad en todo tipo de terreno.

• Sencillez mecánica y estandarización.

• Mayor durabilidad y facilidad de mantenimiento.

💪🇷🇺 Por eso, el GAZ-63 es más que un simple camión: es una demostración brillante de ingeniería práctica y adaptable a las condiciones extremas que enfrentaba la URSS.